Samsung HW-Q800T

Entre las nuevas barras de sonido que ha presentado Samsung, para este extraño y atípico 2020 que estamos viviendo, está la Samsung HW-Q800T. Se trata de la barra que viene a reemplazar a la HW-Q70R, siendo muy parecida pero diferenciándose de aquella en cuestiones de diseño y alguna que otra prestación técnica.

Así pues, aquí también encontramos soporte para Dolby Atmos (y DTS:X), pero también soporte nativo para HDMI eARC, integración completa con Alexa, y pleno soporte para HDR10+ y Dolby Vision. El rediseño también la hace algo más compacta, lo que le seguro que le viene muy bien a no poca gente.

En este análisis, con el producto en mano, he podido comprobar que Samsung sigue en la buena línea en cuanto a calidad de sonido, con una barra de sonido magnífica que ofrece un sonido de muchísima calidad, acorde al precio que se paga por ella.

Samsung HW-Q800T: Especificaciones

  • Formato: Barra de sonido
  • Canales: 3.1.2
  • Drivers: 7 transductores en la barra más el subwoofer
  • Tipo Subwoofer: Inalámbrico, Bass Reflex
  • Potencia: 330W
  • Decodificación: Dolby Atmos y DTS:X
  • Conexiones de cable: HDMI 2.1, HDMI eARC, Audio digital óptico
  • Conexiones inalámbricas: Bluetooth y WiFi
  • Mando a distancia: Si
  • Asistente virtual: Alexa
  • Tamaño: 98 x 6 x 11,5 cm y 3,6 Kg de peso (barra), 20,5 x 40,3 x 40,3 cm y 9,8 Kg de peso (subwoofer)
  • Colores disponibles: Negro

Diseño, controles y conexiones

Un aspecto que ha llamado la atención a más de uno es la desaparición del logo de Harman/Kardon, que sí estaba presente en la HW-Q70R y otros modelos del año pasado y del 2018 junto al logo de Samsung. No sabemos a qué se debe esto, pero en cualquier caso es un detalle menor, pues en esencia se trata de la misma barra con tres o cuatro cambios.

Samsung HW-Q800T: Diseño

Una diferencia de mayor calado que sí aporta esta HW-Q800T respecto a la HW-Q70R del año pasado es la reducción de tamaño, pasando de los 110 cm a los 98 cm de ancho. Tampoco es una reducción enorme, pero esta compactación va a ser una ventaja atrayente para más de una persona con problemas de espacio bajo su televisor.

Este tamaño más compacto también permite un mejor acomodo en televisores más pequeños, yendo perfecta para las 40 pulgadas, al mismo tiempo que permite una buena adaptación, también, para televisores de hasta 55 pulgadas. Hay también una reducción en su altura, que pasa de los 10 cm del modelo anterior a los 6 cm del nuevo, así que otra ventaja para televisores con una peana de poca altura.

La barra tiene en toda su cara frontal una protección con malla metálica. En la parte superior se encuentra la botonera, que en esta ocasión es de botones táctiles, y con funciones distintas a lo que habíamos visto en modelos anteriores de la compañía, con un botón multifunción que sirve tanto para encender la barra como para cambiar la fuente de sonido, así como llamar a Alexa manteniendo pulsado este botón durante 3 segundos.

Los otros botones son los de ajuste de volumen, más un tercer botón que activa y desactiva el micrófono para Alexa. Los comandos los podremos visualizar en la pantalla LED, ubicada como de costumbre en el extremo del lado derecho de la barra.

El mando a distancia incluido es idéntico al de otras barras de sonido de Samsung. Cuenta con el botón de encendido y apagado, el de selección de fuente de entrada, el de emparejamiento Bluetooth, un botón de pausa y reanudación de la reproducción, botón mute, el de selección de modos de sonido y el botón de ajustes de sonido. También los de volumen y el de ajuste del subwoofer.

Las conexiones son estupendas en esta barra. Quizá falte algún puerto HDMI más, pero los que hay vienen muy bien preparados: un puerto HDMI de entrada, con soporte para 4K/60p, HDR10, HDR10+ y Dolby Vision, y un puerto HDMI eARC, con el que poder enviar Dolby Atmos sin pérdidas desde el televisor.

También hay una entrada de audio digital óptico, y por supuesto también las pertinentes conexiones inalámbricas, con Bluetooth y WiFi, pudiendo utilizar Spotify Connect y otros servicios de música y radio en streaming a través de Alexa.

No me olvido del subwoofer. Samsung no se ha roto aquí la cabeza, y trae exactamente el mismo subwoofer que venía con la HW-Q70R. Es un subwoofer inalámbrico, Bass Reflex, con un cono de 8 pulgadas y con una carcasa de MDF.

Transductores y compatibilidad con formatos de audio

La Samsung HW-Q800T presenta la misma configuración de canales que su predecesora, con 3.1.2 canales de audio, distribuidos en los 3 canales frontales, el subwoofer y los dos canales superiores para los efectos de Atmos y DTS:X.

Samsung HW-Q800T: Subwoofer

No obstante, hay que aclarar el funcionamiento de esos canales aéreos. Y es que Samsung no emplea dos drivers propiamente dichos para esos canales, sino que hace uso de una innovación que ya presentó en algunos de sus modelos del 2019: Acoustic Beam. Consiste en una hilera de 56 diminutos agujeros, dispuestos a lo ancho de la barra, y que proyectan el sonido hacia arriba, replicando esos dos canales aéreos.

Los canales derecho e izquierdo tienen ambos un mid-woofer y un tweeter, mientras que el canal central cuenta únicamente con un tweeter de amplio rango. La potencia del conjunto es de 330W RMS, distribuidos entre los 60W de los canales derecho e izquierdo, los 20W del canal central, los 160W del subwoofer y los 30W del altavoz Acoustic Beam.

Todo ello es con el objetivo de reproducir los formatos de sonido envolvente más modernos con las suficientes garantías. Así pues, esta Samsung HW-Q800T puede con Dolby Atmos y DTS:X, y por supuesto con los formatos previos en alta resolución, como Dolby True HD y DTS-HD.

Calidad de sonido

Aunque el logo de Harman/Kardon haya desaparecido, se sigue notando su sello en la fantástica calidad de sonido de esta barra. La HW-Q800T suena muy, pero que muy bien.

Empecemos por su sonido con contenidos Dolby Atmos, que probablemente es lo que más interesa a sus futuros compradores. En este sentido, la HW-Q800T muestra un desempeño notable, con una gran capacidad de inmersión y un sonido bastante envolvente, aún sin contar con altavoces traseros.

La particularidad de esta barra es el uso de Acoustic Beam, esa hilera de pequeñísimos altavoces que proyectan el sonido hacia arriba y de manera panorámica. Este sistema tiene una serie de ventajas y algunos inconvenientes. Por ejemplo, es menos preciso y menos espectacular que los conos con proyección aérea que encontramos en barras como la HW-N850 o la HW-Q90R. Así pues, el sonido de los canales superiores se siente más difuso, menos concreto, menos potente, y por tanto la experiencia con Dolby Atmos no es tan exhuberante ni imponente.

Por otro lado, este sistema sortea los posibles problemas con techos demasiado altos o que no son planos. La proyección que hace Acoustic Beam no trata tanto de hacer rebotar el sonido en el techo, sino de ampliarlo verticalmente, por lo que no se ve tan afectado por cómo sea el techo. Así pues, es una manera de disfrutar de una experiencia Dolby Atmos satisfactoria en salones que, por sus características y dimensiones, tengan una acústica delicada.

He probado la barra con dos películas con audio Dolby Atmos: “Doctor Sleep” y “Alita: Battle Angel”. Con la primera he disfrutado de la espectacularidad de su banda sonora y sus efectos sonoros, en los que la potencia del subwoofer se agradece. Con Alita, el sonido es igualmente espectacular en las escenas de combate, momentos en los se le saca provecho a Acoustic Beam y su capacidad de generar una pantalla de sonido vertical y horizontal, de gran capacidad de inmersión. No cabe ninguna duda que el rendimiento con Dolby Atmos (o DTS:X, que funciona exactamente igual) es el gran punto fuerte de esta barra.

Samsung HW-Q800T: Calidad de sonido

Lo mismo puede decirse de audio en 5.1, tanto Dolby como DTS. La barra reproduce con naturalidad el sonido en su modo Standard, mientras que si escogemos el modo Surround, añade los canales traseros para reproducirlos en Acoustic Beam. El resultado no es tan logrado como con Dolby Atmos, pero se consigue nuevamente una gran capacidad inmersiva.

Si hablamos de la claridad de las voces y los diálogos, la Samsung HW-Q800T tiene un rendimiento muy bueno, como casi todas las barras con canal central. No obstante, hay que apuntar que, en este apartado, queda claramente por detrás de sus hermanas mayores, la HW-Q90R o la HW-Q80R. El motivo es que usa un único tweeter de amplio rango para el canal central, mientras que las otras emplean un tweeter y dos woofers en su canal central, con lo que las voces, sobretodo masculinas, suenan menos potentes, corpóreas y rotundas. Si esta es tu primera barra de sonido, o vienes de una barra sin canal central, vas a notar una mejoría brutal con los diálogos, pero si vienes de una de esas barras que he mencionado, vas a notar una reproducción de las voces claramente inferior.

En el apartado de la música, solo hay buenas noticias. La Samsung HW-Q800T muestra un desempeño brillante en este sentido, con un sonido rico en detalles, balanceado, con un despliegue buenísimo de las frecuencias medias y altas, y con unos graves muy controlados. Todo suena como tiene que sonar, y sin ser una barra de alta fidelidad, puede decirse que su sonido es impecable en su categoría de gama media.

Con videojuegos no he podido probarla, así que no puedo contaros mucho acerca de su modo de sonido Game Pro. Tampoco he podido probar una de as características que más se está encargando de promocionar Samsung: Q-Symphony. Para esta función se necesita un televisor Samsung de la serie Q, y resulta que no todos, sino únicamente los lanzados a partir de 2020.

En cualquier caso, creo que no me pierdo mucho, puesto que se trata de un modo que activa al mismo tiempo la barra de sonido y los altavoces del televisor para un sonido supuestamente más envolvente. Dudo mucho que esto pueda proporcionar un mejor sonido que el que ya proporciona de por sí la barra, pero para quien quiera probarlo con su televisor Samsung, ahí está.

Además de los modos Standard, Surround y Game Pro, también hay un modo llamado Adaptive Sound. Es el típico modo automático, que elige la configuración adecuada en función del contenido. Lo cierto es que yo no he notado diferencia alguna con el modo Surround, así que supongo que, en esencia, lo que hace este modo es usar el sonido Surround para todo tipo de contenido.

Hay también ajustes para regular el nivel de los graves, los agudos y el canal central. Como suele ser habitual en Samsung, se nos ofrecen pocas opciones a la hora de ajustar y personalizar el sonido, y ya ni digamos la calibración acústica de la sala. En cualquier caso, resulta obvio que el púbico al que se dirige un producto como este no se preocupa por estas cuestiones.

Lo que sí ofrece Samsung es la posibilidad de ampliar el equipo, añadiendo los altavoces traseros SWA-9000S. Este kit es una forma muy cómoda, sencilla y relativamente barata de mejorar el sonido para hacerlo mucho más envolvente, y sin duda alguna vale la pena su adquisición.

Samsung HW-Q800T: Conclusiones y alternativas

La Samsung HW-Q800T es una barra de sonido que recomiendo absolutamente. Es la mejor barra de sonido con Dolby Atmos en la gama media, y si andas buscando una barra con Dolby Atmos en torno o por debajo de los 600€, esta es la que tienes comprar. Tiene un sonido fantástico, una gran conectividad y un precio nada desorbitado. No hay más que hablar.

Ahora bien, si puedes gastarte más dinero, es obvio que hay alternativas aún mejores en el mercado. La Samsung HW-Q90R es una barra del año pasado, pero sigue siendo, a día de hoy, la mejor. Dentro de nada saldrán al mercado las HW-Q950T y HW-Q900T, las apuestas de Samsung para su gama alta del 2020, y que con toda seguridad también serán mejores (y mas caras).

Si tu presupuesto no alcanza para la HW-Q800T, una alternativa más económica, con una calidad de sonido equivalente pero sin Dolby Atmos, sería la Samsung HW-Q60T. Si quieres, sí o sí, que tenga Dolby Atmos, échale un ojo a la Sony HT-X8500.